El curso escolar comenzó entre hace unas dos o cuatro semanas según dónde vivas y la etapa educativa en la que estés. A esta alturas podrías pensar que las clases se están realizando de forma regular, ya que el curso empezó hace tiempo. No, no es así. Os cuento mi experiencia.

Si seguís el blog conoceréis el desorden de plataformas educativas del curso pasado cuando todo esto pilló de imprevisto. Muchos profesores, acostumbrados a dar clases totalmente presenciales, no sabían (y algunos siguen sin saber) manejar plataformas de aprendizaje a distancia, como Moodle. Así que cada uno se buscó la vida y utilizó lo que le pilló más a mano. Muchos optaron por depender de servicios externos no libres y se embarcaron en Google Classroom. Otros no se complicaron la vida y simplemente mandaron las actividades por correo electrónico, acabando inundados de correos entrantes. Los más avispados (que son pocos) usaron los recursos de los que disponía el centro, como una Moodle interna o la que habilitó la Junta de Andalucía.

Por suerte este curso, alguien ha puesto orden entre tanto caos y ha obligado a los profesores a que utilicen únicamente los recursos públicos. Aún así, algún que otro profesor sigue esquivando estas restricciones, pero por lo menos tenemos un avance.

Luego, no están preparados para dar clases virtuales. Pocos son los profesores que conocen cómo realizar una videoconferencia, compartir contenido en ella o configurar correctamente la Moodle para aprovechar todas sus características. Conceptos básicos de informática en el ámbito educativo que todo el mundo debería conocer.

Imagen | Kimberly Farmer en Unsplash